Con Carlos Soria Fontán (Ávila, 1939) siempre toca madrugar. Él lo hace todos los días: “Me he levantado a las 5:30, me he preparado, a las 7:00 estaba entrenando en el rocódromo, luego he ido a la compra y estaba listo a las 9:30 para la entrevista”. Nos recibe en su casa de Moralzarzal, en la sierra madrileña, con su camiseta del Manaslu y su colgante de Montañas de vida que siempre le acompaña. Hoy toca hablar de un proyecto que el Club de Alpinismo Peñalara le puso encima de la mesa y que le ilusiona como si fuese un niño, aunque va camino de cumplir los 86 años: “En primavera nos vamos al Himalaya 50 años después de la primera expedición española que coronó un ochomil. Queremos celebrarlo en el mismo Manaslu que subimos en 1975. Estoy loco por ir y conseguirlo”.
Soria formó parte de la histórica expedición que primero intentó el asalto al Manaslu en 1973 y que finalmente lo consiguió en la primavera de 1975, por lo que este proyecto es un homenaje en su 50 aniversario a esa primera expedición española en la que estaba un joven Carlos Soria con 36 años recién cumplidos, aunque los que alcanzaron la cima fueron Gerardo Blázquez y Jerónimo López.
Un reto histórico a los 86 años
Carlos Soria se está preparando día a día para poder afrontar un reto al alcance solo de los elegidos: conquistar un ochomil con 86 años y hacerlo después de su grave accidente en mayo de 2023, en el Dhaulagiri, cuando un sherpa se lo llevó por delante a 7.700 metros y se fracturó el peroné, lo que obligó a la expedición a realizar un descenso peligrosísimo de 17 horas en el que Carlos Soria se salvó de milagro.
Podemos hacer dos cosas en el Manaslu: historia del montañismo y ayudar a los niños del colegio de Sama
Ahora, su mente está puesta en el Manaslu dentro de cinco meses. Entrenamientos en el rocódromo, en la montaña, escalada… Todo para llegar en la mejor forma a la primavera de 2025. Carlos echa la vista atrás y así recuerda cómo vivió su primer asalto a un ochomil: “La primera vez lo viví con una emoción impresionante, era el año 73 e íbamos un grupo de madrileños -Soria es abulense de nacimiento pero se siente también madrileño- al Himalaya a conquistar una de las grandes montañas. Estábamos revolucionados, hacíamos reuniones todos los días… Tengo hasta el presupuesto de aquella expedición y una revista que editamos con todos los buenos momentos de la expedición del año 73. Y bueno, fue muy bonito. Fue un otoño muy lluvioso, con 150 porteadores más los sherpas y el oficial de enlace y pasamos por sitios muy complicados con mucha agua… No logramos la cima”.
A la siguiente, en 1975, hicieron historia: “Entonces ya sabíamos a dónde íbamos. En aquella época nosotros no teníamos equipo para ir a una gran montaña, ni mucho menos. Lo más que habíamos hecho había sido lo de Alaska, pero no era un ochomil como ahora. Aquello verdaderamente era la revolución”.
Así fue el primer ochomil español en 1975
Carlos Soria repasó con MARCA cómo fue el primer ochomil que coronó una expedición española en el Himalaya. “Guardo esta revista ‘Cimas’ de 1975 que está casi dedicada a la conquista del Manaslu. Hay una foto famosa mía en la que se ve cómo monto la cuerda por encima de 7.000 metros con este piolet así y un martillo que me sujetaba. Además llevaba ya la mochila a cuestas para ir hacia la cumbre y en un tramo de 40 metros muy difícil me puse malo. Por eso, en aquella ocasión no pude dormir, no pude llegar a la cumbre, que sí hicieron Gerardo Blázquez y Jerónimo López, pero la expedición coronó y aquello era una labor de equipo. Un equipo total que había trabajado para hacer la cumbre y bueno, nos volvimos encantados de la vida”.
Sama, el ‘otro’ pueblo de Carlos Soria
Soria relata la diferencia entre una expedición de hace 50 años y la que ahora afrontarán la próxima primavera en el Manaslu: “Las botas de entonces eran alemanas, con un botín de fieltro, otro de piel y además un cubrebotas. Y aquello pesaba, con todo, más de un kilo más que cada bota de ahora. El mono de pluma de ahora también ha cambiado mucho. Otras cosas como el saco de dormir son muy parecidos. Y los piolets son diferentes como podéis comprobar”, afirma el alpinista mientras se prepara para la foto principal que luego ilustra este reportaje.
El abulense se emociona recordando el Manaslu: “Me trae muchos recuerdos. Porque es la única montaña de los 14 ochomiles que tiene vida alrededor. Tiene glaciares, pero no tanto como otras que están alejadas de la civilización. Allí hay un pueblo pequeñito que se llama Sama, que es una maravilla. La primera vez que estuvimos allí en 1973 era la tercera expedición que pasaba. La primera fue una japonesa, luego unos alemanes y después nosotros”, recuerda Soria.
Hay una parte del proyecto Manaslu 2025 que tiene un claro componente social. Carlos Soria volverá a su pueblo del Himalaya, Sama, una aldea situada a 3.500 metros en las faldas del Manaslu, en donde el alpinista abulense comenzó en 2011 un proyecto educacional en el colegio al que van 100 niños y niñas entre 5 y 12 años: “En Sama nos quieren mucho, es como mi pueblo, casi soy hijo adoptivo. En la primavera de 2010 volvimos mi amigo Sito Carcavilla y yo al Manaslu a intentarlo y en primavera no pudimos subir. Hizo muy malo y a la bajada vimos que habían hecho un colegio. La parte baja del Manaslu está llena de vida y habían construido una escuela maravillosa. Pensamos que les podíamos llevar lapiceros, cuadernos, material y nos dijeron: ‘Aquí necesitamos 70 colchones, 70 edredones y lo que podáis traer’.
Carlos Soria volvió para entonces sí hacer cumbre en el otoño de 2010 en el Manaslu: “Se nos ocurrió la idea de hacer camisetas que vendimos, hicimos dos trekking, uno que fue conmigo al principio para llevar lo que nos pidieron -colchones y edredones- y otro que fue con Sito que trajo botas, material y absolutamente de todo como ropa para niños, balones, uniformes y el BBVA les pagó durante un tiempo profesores de inglés. Fue una época muy bonita para nosotros, porque Sama no es cualquier pueblo, es nuestro pueblo, mi pueblo. Ahora vamos a ayudar al colegio”.
Me entreno todos los días y tengo mucha ilusión porque aunque son muchas cosas las que me echan para atrás, mis ganas de ir allí son tan grandes que todo me echa para adelante
“En Sama además conocimos al lama, me quedé en el monasterio cenando con ellos y durmiendo allí al lado del fuego con el hijo, un lama más joven que posiblemente ahora sea el que esté. Así que no es solo es ir al Manaslu, es que es ir a aquel lugar. Y nuestra intención es ayudar sobre todo al colegio, por llevarles algunos ordenadores, que los puedan utilizar, ya veremos, pero algo haremos eso y lo llevaremos nosotros. Va a ser muy emocionante”, dice Soria mientras nos enseña fotos de niños de Sama.
Apoyo de la Comunidad de Madrid
Ahora, 50 años después de aquella primera expedición española que hizo cumbre en el Manaslu, Soria está preparándose a fondo para llegar a tope a la primavera de 2025. Se trata de una expedición apoyada por la Comunidad de Madrid y que busca patrocinadores para afrontarla en las mejores condiciones: “Ahora tengo mucha ilusión porque aunque son muchas cosas las que me echan para atrás, mis ganas de ir allí son tan grandes que todo me echa para adelante. Quiero ir y estoy luchando por ello, con la rodilla, con mi pierna, la que se me rompió precisamente hace un par de años. Y bueno, ahí estoy, pero bien”, afirma Soria sobre el hecho de tener que afrontar otro ochomil con 86 años cumplidos.
“Me entreno todos los días. Una vez dentro de casa, otras veces por la montaña y otras en el rocódromo porque he notado en el rocódromo que hago mucha musculatura y es lo que necesito. Cuando me ocurrió el accidente me encontraba fortísimo y eso hacía mucho tiempo que no lo sentía. Ya tenía la prótesis en la rodilla, pero fuimos como un tiro hacia la cumbre aunque luego pasó lo del accidente. Fue una injusticia terrible, pero bueno, ahora lo vamos a arreglar volviendo al Manaslu y haciéndolo 50 años después, que es muy bonito”, nos cuenta Carlos a la hora de relatar cómo se prepara para el Manaslu.
Cima en el Manaslu con 71 años
Carlos Soria es el primer alpinista que ha hecho diez de sus doce ochomiles después de los 60 años. Es curioso que el Manaslu, la octava montaña más alta del planeta, fue coronada por el alpinista abulense en 2010: “Tuve que esperar 37 años desde mi primer intento. Hice una subida estupenda, sin oxígeno, con 71 años y sin ningún problema. Tuvimos muy buen tiempo. Había bastante gente, varios españoles y al final subimos sólo dos”, señala a la hora de recordar su cima al quinto intento de una montaña que seguramente es la más especial para Carlos.
El plan para esta expedición que liderará Soria en la primavera de 2025 ya está definido: “La idea es irnos a aclimatar 14 días al valle del Khumbu, antes de ir en helicóptero al campo base del Manaslu. Una vez que hemos hecho eso, Sito, Luis y yo subimos al campo 1, dormimos, subimos hacia el campo 2, bajamos otra vez al campo 1, volvemos a dormir y bajar al campo base. Y ya estamos preparados para cuando haya buen tiempo ir a la cumbre. Si tarda mucho el buen tiempo, tenemos sitios para hacer algún entrenamiento. Esa es nuestra estrategia y nos ha ido bien”.
Expedición y patrocinio
El equipo que va a formar parte de la expedición ‘Manaslu 50 años después’ ya está en marcha, con Carlos Soria al frente: “Es posible que pueda venir Sito Carcavilla -su ángel de la guarda en el Dhaulagiri-, lo que es seguro es que nos acompañará Luis Miguel López Soriano y su cámara para contar todo lo que pase, además de Jorge Palacios, Pedro Mateo y Lucía Guichot. También viene el presidente de Peñalara, Javier Garrido, el vicepresidente, Alberto Flechoso, y una mujer como Belén Rodríguez, que va a intentar subir a la cumbre del tirón y bajar. Puede que estemos juntos en la cumbre porque nosotros saldremos antes y Belén ascenderá cuando esté montado todo, haya cuerda fijada donde hagan falta y esté la huella hecha para poder ir a toda velocidad. Es otro aliciente que tiene esta expedición, la ascensión que sería un récord femenino”.
Belén Rodríguez, récord mundial a la carrera
Belén Rodríguez, del Club Peñalara, formará parte de la expedición Manaslu 50 años después junto a Carlos Soria. Se trata de una especialista en velocidad, corredora de montaña, que intentará sin oxígeno hacer la cima del Manaslu con un recorrido de campo base (4.750 metros), cumbre (8.163 metros) y vuelta al campo base. Sería la primera mujer que lo intentará y se estima que tardará entre 20 y 30 horas en completar un recorrido muy duro.
Belén es nutricionista deportiva y tiene varios récords en montaña, ya que va muy bien en altitud. La idea es que cuando Carlos Soria haga el ataque a cumbre desde el campo 3, la corredora del Peñalara salga del campo base para comenzar su aventura hacia la cumbre del Manaslu, con la posibilidad de encontrarse ambos en la cima de este ochomil.
Ahora, Belén se está preparando a conciencia y tiene por delante un reto desde la Puerta del Sol de Madrid hasta la cumbre de Peñalara para entrenarse ante la próxima cita en el Manaslu.
El proyecto y la expedición depende en buena medida del apoyo de patrocinadores, aunque el aval de la Comunidad de Madrid garantiza que en la primavera de 2025 estén en el Manaslu para una cita histórica del alpinismo español: “Queremos hacer muchas cosas pero dependemos mucho del presupuesto que tengamos. No podemos hacer planes, pero vamos a ir. Esto pone la guinda 50 años después en el Himalaya, tiene una parte de historia del montañismo español y también un componente social”.
Club Peñalara
“La idea de esta expedición partió desde el Club Peñalara, con el que muchos de nosotros tenemos una vinculación al ser madrileños y miembros desde hace años. Entre el presidente y el vicepresidente recordaron que va a ser ahora el 50 aniversario de nuestra primera expedición que coronamos en el Manaslu y entonces, todo se puso en marcha”, dice Soria sobre este proyecto en el que además de la expedición habrá charlas, conferencias, concurso literario y documental. Nuestra idea es coronar y llevar allí nuestra bandera de la Comunidad de Madrid, la bandera del club, de mi pueblo Moralzarzal…”.
A Carlos se le ve feliz, radiante, con la ilusión de poner el mejor broche posible a su carrera de leyenda. Con el Manaslu empezó su amor por el Himalaya con 34 años -su primera expedición en 1973- y con el Manaslu puede poner la guinda con 86 años en la primavera de 2025. “Sería fantástico, solo el hecho de intentarlo con todos mis compañeros y luchar por ello es maravilloso. Necesitamos patrocinadores que nos ayuden. Tenemos mucha visibilidad en todo el mundo y esta sería la primera vez que se hace no solo aquí, en Madrid o en España, sino en el mundo. Si conseguimos que yo suba 50 años después…”, afirma emocionado imaginando una cumbre que sería el colofón a su vida en la montaña. El Manaslu espera. Y el sueño de Carlos Soria también… porque con 86 años se pueden seguir cumpliendo sueños.